Steven Adams, de chico malo de la NBA a escudero perfecto de Westbrook

Alex Abrines me presenta, después de una nueva victoria de Oklahoma en Sacramento, a un jugador que impone respeto, de esos que puedes esperarte una seriedad a la altura de sus 2,13 metros. Me acerca a él medio riéndose, viendo mi cara de incertidumbre y confiando en cómo se las gasta su compañero. Pues sí, así ha sido, se las gasta y de qué manera. Lejos de lo rudo que aparenta en la pista, Steven Adams me da la mano, pero tarda poco en ver que con una sola de las suyas le sirve para abrazarme a mí y a Abrines juntos. Así que opta por esto último mientras me dice que con mi corbata y mis expresiones: “marca España”.
Un tipo que sorprende y que me ha ganado en el tú a tú, porque lo de ganar en el parqué ya lo refleja su Doble-Doble de hoy: 20 puntos y 23 rebotes.
¡Este es uno de los muchos motivos por los que me engancha tanto mi trabajo, cada partido es una página nueva que se llena con descubrimientos, personas y jugadores como Steven Adams!

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